(25/09/16) La Asociación del Azúcar (The Sugar Association), institución que nuclea a los productores azucareros de los Estados Unidos, cuestionó los continuos intentos de la Dra. Cristin Kearns “de replantear sucesos históricos para alinearlos convenientemente con la actual tendencia narrativa anti-azúcar, sobre todo cuando en las últimas décadas de investigación se ha llegado a la conclusión de que el azúcar no tiene un papel único en las enfermedades cardíacas”.
La entidad reaccionó de tal manera en una comunicación de prensa emitida frente a la repercusión y los embates dirigidos contra el producto después de que el Journal of the American Medical Association (JAMA) reprodujera un trabajo de la Dra. Kearns donde son desacreditados estudios sobre el azúcar realizados en 1967.
La entidad reconoció que “la Fundación de Investigación del Azúcar debería haber ejercido una mayor transparencia en todas sus actividades de investigación”, pero destacó que “cuando los estudios en cuestión se publicaron, las normas de transparencia y divulgación de los mecanismos de financiación no eran las de la actualidad. Más allá de esto –enfatizó la Asociación-, es difícil hacer comentarios sobre acontecimientos que habrían tenido lugar hace 60 años, y sobre documentos que nunca hemos visto”.
La asociación azucarera de los Estados Unidos consideró “lamentable” y “contraproducente” que “la investigación financiada por la industria sea calificada como contaminada. Lo que a menudo falta mencionar en este contexto –apuntó- es que las investigaciones financiadas por la industria han sido fundamentales para abordar las cuestiones clave”.
Al referirse a que “el azúcar no tiene un papel único en las enfermedades cardíacas”, la Asociación puntualizó que la Administración de Alimentos y Drogas de los Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés), reconoce que “el consenso de los informes científicos en los EEUU no respalda una relación de causa y efecto entre el consumo de azúcares añadidos y los riesgos de obesidad o enfermedades cardiovasculares”.
“Lo más preocupante es el creciente uso de la titulación malintencionada de artículos periodísticos para desprestigiar la investigación científica de calidad”, dijo la Asociación al tiempo que manifestó la decepción de los azucareros estadounidenses por “de ver que una publicación de la talla de JAMA sea empujada a esta tendencia”.
La Asociación aseguró que “siempre está tratando de comprender mejor el papel del azúcar y la salud, pero nuestras afirmaciones –aseveró- se basan en los hechos y en ciencia de calidad”.
En el comunicado, la Asociación del Azúcar destaca que el Comité Científico Asesor en Nutrición (SACN) del Reino Unido realizó “pruebas aleatorias controladas examinando factores de riesgo cardiovasculares, peso corporal, marcadores inflamatorios y factores de riesgo de diabetes tipo 2” que “no han demostrado efectos por el incremento del consumo de azúcar”, según destacó el organismo en un informe sobre Carbohidratos y Salud datado el 17 de julio de 2015.
Asimismo puntualiza que la Asociación Americana de Diabetes declaró que el azúcar no es diferente al almidón con respecto a los niveles de glucosa y lípidos en la sangre, cuando su consumo es inferior al 35% del total de las calorías y destacó que el consumo actual de azúcares añadidos en los Estados Unidos es de menos del 13% de las calorías. (Evert AB, Boucher JL, Cypress M, et al. Recomendaciones terapéuticas de Nutrición para el manejo de adultos con diabetes. Diabetes Care. 2014; 37 Sup. 1:S120-143.)
Link del Comunicado de la Sugar Association
https://www.sugar.org/the-sugar-association-statement-on-kearns-jama-study/