El presidente del Centro Azucarero Argentino (CAA), Jorge Feijoó, le solicitó al gobernador de la provincia de Tucumán, Osvaldo Jaldo, “su gestión y los canales de diálogo necesarios” para que las modificaciones a la ley de Biocombustibles sean incluidas en la nueva ley llamada de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos conforme “a los términos del acuerdo alcanzado entre las provincias productoras, las autoridades nacionales y las cámaras productoras de bioetanol de caña de azúcar y maíz”.
Feijóo realizó el pedido durante la audiencia que le concedió el gobernador Jaldo el martes 16 de abril en la que, además, le informó al mandatario que augura una muy buena zafra para este año “que exigirá un máximo en el aprovechamiento de la capacidad instalada, tanto en la molienda como en la producción de alcohol”.
En declaraciones posteriores al encuentro, Feijóo confirmó su seguridad de que el gobernador tiene muy buena disposición en relación con los objetivos del sector sucroalcoholero en la negociación de la ley y que “está involucrado desde que empezó el trámite parlamentario en enero pasado”.
Feijóo señaló que “la desregulación forma parte de una política nacional” y que el sector aceptó “ir a un mercado más abierto y competitivo en cuanto a la oferta y demanda y a un crecimiento de los cortes de etanol con naftas”.
“Hay un acuerdo amplio en el sector para modificar la ley actual de biocombustible, tanto de las provincias productoras como de las autoridades nacionales y las cámaras productoras del bioetanol de caña de azúcar y maíz que importa la participación de un 12% de bioetanol en la mezcla con naftas, con un aporte de 6% de bioetanol de caña, cuyo cumplimiento exige extremar la producción de alcohol”, indicó Feijóo.
En relación con las expectativas para la temporada que empieza, el presidente del CAA ratificó que “se espera una zafra muy buena en cuanto a caña para cosecha porque el cañaveral registra un crecimiento importante, producto de las condiciones climáticas favorables de este año, aunque aún no hay números; hay que esperar el informe de estimación de la Estación Experimental Obispo Colombres (Eeaoc), que es un relevamiento fundado”, añadió.
“Esto exigirá un máximo en el aprovechamiento de la capacidad instalada, tanto en la molienda como en la producción de alcohol”, expresó. En ese sentido reiteró que “los ingenios proyectan producir 600 mil metros cúbicos de alcohol”.
En función de ello dijo que “ya se cerraron contratos de exportación por 450 mil toneladas de azúcar, lo que es significativo a esta altura temprana del año, mucho más que las 100.000 toneladas exportadas en la zafra anterior en el mismo período”.
Feijóo señaló que “hay condiciones favorables en los mercados externos para exportar en buenos términos, porque hay demanda de azúcar como consecuencia de pérdidas productivas en otros países, con un precio que se mantiene firme desde hace dos o tres años”.
En cuanto al mercado interno apuntó que en los últimos dos meses “la demanda de azúcar se resintió, quizá como consecuencia de alguna acumulación de stock o de la caída de la actividad general, aunque tradicionalmente el consumo anual no registra cambios significativos”.
Asimismo, puntualizó que “lamentablemente el precio cayó bastante desde enero, máxime si a la variación nominal se le computa la inflación”.
Acerca del alcohol dijo que “también tendrá demanda sostenida porque, aunque el consumo de nafta se retrajo durante los últimos tres meses como consecuencia del aumento del precio, se espera que en el resto del año no haya variaciones relevantes respecto del año pasado. Por otro lado -añadió-, el precio del bioetanol con destino a su mezcla con naftas recuperó retraso desde diciembre”.
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